El mercado móvil está sufriendo un cambio muy importante. Los operadores están empezando a ofrecer tarifas para navegar por Internet a un precio más aceptable por los usuarios. Es algo que llevan demandando desde hace mucho, y que no se había hecho realidad hasta hace bien poco con la aparición de tarifas planas para la navegación y la mejora de las infraestructuras de los operadores. Y, mejor aún, parece que la tendencia es ofrecer más servicios a menor precio.
Los usuarios van a empezara utilizar, en un plazo de uno a dos años, el móvil como herramienta de consulta de Internet, e incluso para la realización de transacciones más o menos complejas. Esto es ya una realidad para algunos sectores. Trabajan con usuarios especialmente atraídos por estos servicios, como profesionales de la banca, inversores o gestores empresariales, y ya tienen sus servicios y aplicaciones Web adaptadas para su uso a través de móviles y PDAs. El siguiente paso será la demanda , en el móvil, de los servicios que el usuario acostumbra a tener en su PC. Navegar por blogs, comprar en su tienda favorita, visitar Webs, etc.
¿Estamos preparados para esto?¿Estamos ofreciendo a los usuarios nuestros servicios de la manera correcta?. Ni si quiera las páginas Web de instituciones y organismos públicos, que por ley deben ofrecer accesibilidad y usabilidad en los soportes comunmente utilizados hasta por minorías, están preparados para ofrecer una experiencia de calidad a los navegadores Web de los móviles y PDAs. Excepto casos como páginas de bancos y buscadores de uso masivo, no es habitual encontrar páginas diseñadas para terminales móviles. A pesar de que la capacidad de los navegadores Web de los móviles ha mejorado notablemente en los últimos años, y que tienen casi todas las funciones básicas de un navegador de PC, no se puede obviar el principal problema. Seguimos teniendo un móvil.Una pantalla reducida, de poca capacidad de texto y limitada resolución. Normalmente sin un teclado cómodo, y sin un dispositivo señalador (ratón, trackball, etc.). Y peor aún, con un ramillete de miles de posibilidades para el proveedor, ya que prácticamente no hay dos móviles con las mismas características.
Este problema no es solo de los proveedores de servicios Web, sino también de los operadores móviles. ¿Quién quiere navegar por Internet desde el móvil si todo se ve fatal? Nadie. Con lo cual el negocio para los operadores está limitado. Es por esto que aparecieron hace cosa de un año los transcodificadores. Unos programas que los operadores instalan en las entradas de sus redes, analizan todas las Webs que solicitan los usuarios, y que “adaptan” de manera automática los contenidos de los sitios Web al terminal móvil desde el que se está accediendo a Internet. He puesto “adaptan” , aunque en realidad debería a ver puesto “machacan”. Las páginas Web han sido cuidadosamente diseñadas para ser vistas en un PC, con una pantalla grande, y sin problemas de navegación. No hay manera automática de elegir que apariencia es la correcta para un móvil. Se puede más o menos acondicionar eliminando de la Web los elementos que el móvil no entienda, y adaptando otros, como imágenes o textos largos para que se puedan ver correctamente. El resultado normalmente parece más a un refrito que una Web que un empresario quiera mostrar a sus clientes.
Los problemas para controlar la experiencia del usuario cuando nuestro sitio Web es visitado con un terminal móvil son claros, y necesitamos resolverlos. Queremos tener control sobre la calidad de esa experiencia, ya que es la imagen de nuestra marca la que está en juego. Es nuestro servicio el que puede quedar obsoleto. Son nuestros clientes actuales y potenciales los que van a dejar de venir si no somos capaces de darles una satisfacción. Para esto solo tenemos una opción: olvidarnos de adaptar, crear páginas específicas para móviles, y obtener la información bebiendo de la fuente.
El proceso ideal para hacer la Web 2.0 móvil, y entrar de lleno en la Web 3.0, es aplicar un sistema de identificación de terminales móviles en nuestro sistema Web, y generar el contenido adecuado dependiendo de las características del dispositivo (esto sí de manera automática). La información que se muestra y la funcionalidad que se ofrece son las mismas. Lo único que varía es el formato, que ha sido cuidadosamente diseñado dependiendo del método de acceso. Este sistema ha sido empleado con éxito por Somms.NET en el desarrollo de la enciclopedia Wikipedia Mobile para Kimia Solutions, e implantada en Vodafone España y Mobistar Bélgica. Hemos bebido de la fuente, Wikipedia, para obtener la información, y hemos generado el interfaz gráfico adecuado según el terminal del usuario.
Si quieres asegurarte un futuro en el nuevo Internet móvil, aquí podemos ayudarte.